Para que un código de barras sea efectivo debe cumplir una máxima: ser legible. Esto implica que, independientemente del soporte en el que se añada, la calidad, definición y contraste (además del tamaño, pero esto merecería un artículo propio) debe ser lo suficientemente clara. De esta forma cualquier dispositivo de lectura de código de barras no tendrá ningún error al leer su información incluso si hay color en el código de barras. ¿Por qué no reforzar el branding en este tipo de elementos utilizando nuestro color Pantone, o al menos uno que sea parte de la identidad de marca? Si tienes algo así en mente, lee atentamente estos tips sobre el color del código de barras.

Recuerda que los lectores láser, que son los más utilizados en la actualidad para la lectura de códigos de barras, decodifican la información interpretando el contraste entre zonas más claras y más oscuras. Esto no significa que debamos utilizar únicamente los códigos de barras de fondo blanco e impresión en negro.

El contraste de impresión en los códigos de barras

Seguro que has visto ejemplos de productos que imprimen sus códigos de barra sobre colores diferentes al blanco. No todo tiene que ser aburrido e impersonal. Las tecnologías actuales de los escáneres permite una lectura muy precisa incluso sobre fondos de color que resta contraste. Ahora bien, debemos asegurarnos de que este es suficientemente intenso para el color del código de barras no genere un error de lectura.

¿Cómo funciona el lector de código de barras? El haz de luz del escáner literalmente rebota sobre la tinta y con esa información vuelve al aparato que lo decodifica. Si no hay suficiente claridad, definición y contraste, se dificulta o anula la capacidad de lectura del dispositivo.

Ante el lector de códigos de barras, la intensidad de la luz reflejada debe ser potente para una lectura inequívoca si se apuesta por el color del código de barras.

Otro factor que influye en cómo el escáner lee el código de barras es la capacidad de reflexión frente a un foco de luz que tienen los propios colores. Si la combinación fondo-código absorbe demasiada luminosidad, no habrá lectura del escáner.

Los colores claros presentan un grado de absorción muy bajo y un gran poder de reflectancia; en el otro extremo, los colores más oscuros absorben más luz y, consecuentemente, menos rebote generan. Por este motivo se utilizan siempre, tanto si es sobre fondo blanco o sobre color, tintas claras en contraposición a las oscuras.

El color del código de barras: cómo definir el adecuado contraste

Debido a las cualidades del color del código de barras cuando actúa sobre él un haz de luz, no podemos utilizar cualquier combinación cromática. Aunque tranquilo, que hay opciones para personalizar al máximo nuestro código.

Lo que hay que grabarse a fuego es que a mayor contraste entre los elementos (código de barras y fondo) más eficaz será la lectura.

Ahora bien, en la generación de este contraste para cambiar el color del código de barras por el tradicional blanco sobre negro, influye directamente la superficie sobre la que se imprime. Cada material absorbe las pigmentaciones de forma diferente y, por consiguiente, el resultado final sobre el producto puede diferir notablemente sobre la imagen digital.

Muy importante: sea cual sea el color del código de barras, será una impresión con colores puros. Los degradados podrían generar problemas de lectura.

  • Cuando se imprime sobre papel general, se recomiendan como colores de códigos de barras el negro, el azul, el verde, el violeta o el marrón, mientras que para el fondo, además del blanco, es interesante el amarillo, el naranja, el rojo o el beige.
  • Código sobre papel Kraft: aquí se toma el propio color del papel como fondo, y dado que ya tiene cierto poder de absorción se ha de buscar el contraste pleno. Lo más fiable es apostarlo al negro o colores muy oscuros.
  • ¿Códigos de barras sobre materiales reflectantes? Si puedes evitarlo, hazlo. Si no es factible, opta por las barras en oscuros y clarea el fondo con un pigmento suave.

Combinaciones recomendadas y cuáles evitar

La opción más legible no cabe duda que tiene el fondo blanco y el negro en las barras por protagonistas. Pero puedes darle más color al código de barras con estas sugerencias:

  • Código de barras con fondo blanco: va bien si la tinta de las barras es azul, verde y marrón, y cuanto más oscuros, mejor.
  • Fondos amarillos aportan legibilidad cuando el código se imprime en negro, azul, verde o marrones oscuros.
  • Código con base naranja o amarilla pide barras en verdes, negros, azules o incluso marrones.

Usos del color en el código de barras no legible

Los principales errores al plantearse utilizar el color del código de barras tienen que ver con estas decisiones:

  • Imprimir sobre blanco colores como el amarillo, el naranja, el marrón claro, el rojo o el color oro o plata.
  • Código de barras negro sobre fondo verdoso, marrones oscuras y azul.
  • Fondo rojo y barras en verdes, azules y marrones claros.
  • En los fondos verdes, las barras en azul no ayudan a la legibilidad del código de barras.
  • Utilizar como base un dorado restringe el uso del negro, naranjas y rojos.

Con todo, lo más importante y eficaz es realizar una prueba de impresión real a fin de evaluar el resultado y hacer un test de legibilidad. Para la prueba digital, puedes hacer una consulta en la Asociación de Fabricantes y Distribuidores.

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